Salimos de Ribadeo con sol y una temperatura muy agradable
para las fechas en las que nos encontramos, pero como las previsiones climatológicas no
eran muy favorables y O Cebreiro que está a 1.300 metros de altitud es una de
las localidades mas frías de Galicia nos abrigamos bien.
De Ribadeo a Cebreiro hay 152 Kms. aproximadamente dos horas
de viaje. Salimos sobre las 10 de la
mañana, antes de llegar a la autovía en
Baleira paramos a tomar un café, como el sol seguía acompañándonos, tome estas bonitas fotografías de los campos
con sus colores de otoño:
Continuamos el viaje hasta que llegamos a O Cebreiro
Acceso:
Desde Madrid,
tomamos la autovía A-6, dirección a A Coruña hasta la salida 431, Pedrafita do Cebreiro. Y si vamos desde La Coruña, hay que tomar la
salida 432. O Cebreiro está situado a 6
km de la salida de esta autovía, con lo
cual es muy fácil y cómodo llegar allí.
O Cebreiro, una parroquia del concello de Pedrafita do Cebreiro, en la provincia de
Lugo, es solamente una pequeña aldea rural que tiene 13 habitantes, pero esta pequeña aldea, a pesar de su reducido tamaño, es muy conocida
por varios motivos, el primero, en orden cronológico, fue que ya los romanos la utilizaron como vía
de acceso al centro de Galicia, vía que luego seguirían los peregrinos y, después
por su famoso “Milagro de O Cebreiro” que más adelante os relataré.
Según íbamos subiendo por la carretera que sale desde Pedrafita hacia
O Cebreiro, el sol nos empezó a
abandonar, aun así íbamos disfrutando de un bonito paisaje, pues la aldea se encuentra ubicada en la zona
de las sierras de Os Ancares y O Courel, y forma parte de la Reserva de la
Biosfera de Os Ancares de Lugo.
Al llegar, sobre las 12 de la mañana, paramos en el cruceiro
y fuimos rodeando hacia la aldea, unos 100 metros, disfrutando de las vistas.
Como aun nos quedaba tiempo antes de la comida, y el tiempo
amenazaba lluvia estuvimos dando un
paseo, por si acaso mas tarde no podíamos hacerlo.
Visitamos la iglesia parroquial, paseamos por las calles, entramos en
las tabernas y tiendas y esto es lo que vimos:
Los
edificios
La aldea esta formada por un puñado de casas, principalmente
dedicadas a dar servicio a los peregrinos y turistas que la visitan (alojamiento,
restaurantes, tiendas de recuerdos, bares) de sólida construcción, en piedra con
techos de pizarra, las calles empedradas y cuando llueve, como sucedió durante
nuestra visita, adquieren ese brillo que les da tanta luz.
Las
Pallozas
Son unas construcciones prerrománicas típicas de esta aldea,
de sencilla construcción circular con el techo de paja con forma cónica, que
mantienen en perfecto estado de conservación. Una de ellas esta dedicada a
Museo Etnográfico y se puede visitar.![]() |
Foto tomada de la web: foro.tiempo.com |
El
Santuario de Santa María la Real de Cebrerio:
“El Priorato de O Cebreiro sobrevivió llevando una vida artificial
hasta el fin de sus días. Y pudo sobrevivir gracias a que los monjes edificaron
y explotaron un mesón con el que conseguían fondos suficientes para el
mantenimiento del hospital. Pero apenas si les dejaron el tiempo suficiente
para lograr rehabilitarse, pues enseguida se presentó una situación mucho peor
que quebró todas las esperanzas y significó la muerte del Priorato y del
hospital. Este fatídico momento tiene un nombre y una fecha: Exclaustración,
1835…
…Pero lo cierto es que esta política iniciada por Mendizábal en el
1835 fue alcanzando, tarde o temprano, a casi la totalidad de los conventos y
monasterios de España. En tal estado de cosas O Cebreiro no iba a ser una
excepción. En el año 1854, como consecuencia de la Ley de Desamortización de
los bienes eclesiásticos, o monasterio de O Cebreiro debe dejar de existir como
tal y los monjes benedictinos se vieron obligados a abandonarlo…”
“La historia refiere como un día de invierno, con mucho frío
y nieve, un campesino de la aldea de Baixamaior, perteneciente a esa parroquia,
acudió a misa como siempre, a pesar del
mal tiempo. El sacerdote pensó para sí mismo
que el campesino podía haber muerto de frío en el camino, sólo para
arrodillarse delante de un poco de pan y vino.
En el momento de la consagración la hostia se transformo en carne y el
vino en sangre, entonces la imagen de la Virgen María que estaba colocada
delante del altar mayor inclino la cabeza para adorar el cuerpo y la sangre de
Cristo.”
El templo: De factura prerrománico, fue fundado por monjes benedictinos en el siglo IX, de planta basilical tiene tres naves y torre.
Fue restaurado en 1962, pues estaba en una situación ruinosa
después de dos grandes incendios, en el
exterior tiene a un lado el cementerio y al otro la Hospedería
La talla de la Virgen: Es una imagen de Santa María la Real, la Virgen del Santo Milagro, pieza románica del siglo XII, restaurada en 1971.
Capilla de San Benito: Situada en la nave norte y dedicada a San Benito, en recuerdo a los monjes de esa orden que estuvieron allí hasta 1853, y que se fueron como consecuencia de la desamortización de Mendizábal.
El baptisterio: Se encuentra en la entrada en la parte izquierda, y cumple con el canon antiguo de separación del templo. Allí podemos ver la gran pila bautismal del siglo XVII, que se usaba para el bautismo por inmersión.
Capilla del Santo Milagro: en la que se encuentran el altar con las reliquias del milagro: el Cáliz, la patena y el relicario y los sepulcros del sacerdote y el campesino que están enterrados uno junto al lado del otro bajo dos arcos al lado del altar.
La
Hospedería: Se encuentra al lado del templo y después de una importante
restauración se abrió al público en 1966, en su interior conserva un relieve de
la edad de bronce.
Después del paseo de reconocimiento, y como la lluvia
empezaba a arreciar, nos refugiamos en la “Venta Celta”, un mesón muy acogedor, en
el que se estaba muy bien al calor de una buena chimenea, allí tomamos unos vinos.
La
comida
Y cuando se estaba acercando la hora de nuestra reserva nos fuimos a comer. Teníamos una reserva en el restaurante del Hotel Cebreiro a las 13:30, para comer un “cocido tradicional”, normalmente no es necesario hacer reserva, pero si llamas diciendo que vas es mejor, el cocido no se hace en unos minutos, por lo que es mejor avisar…mientras nos prepararon la mesa, nos quedamos en el bar, se estaba muy bien, gracias a la chimenea que tenía una buena lumbre.
Allí estuvimos esperando unos minutos hasta que nos avisaron de que nuestra mesa estaba preparada. Después de visitar los monumentos, nos apetecía una buena comida.
Una vez estuvimos sentados
a la mesa empezó el desfile de
platos. Primero nos sirvieron una fuente con la sopa. Mis compañeras de viaje, que ya sabían como
iba ésto, sólo tomaron un plato, pero yo que era la primera vez que asistía a un
evento de estas características me tome dos platos y no repetí nuevamente, porque
me avisaron a tiempo, pero lo hubiera hecho de buen grado.
Después de la sopa, aparecieron las fuentes:
-
Grelos con patatas
cocidas
- Garbanzos con chorizos y carrilleras troceadas:
- Lacón y cabeza:
- Otra fuente con butelo:
Y este es el plato que me servi:
Tarta de Santiago, frixuelos y queso de cebreiro con membrillo:
Y por supuesto, no podía faltar un buen café y para acompañarlo un buen orujo:
Pues bien, menos del orujo, que no bebo, de todo lo demás di cumplida cuenta.
Y todo este menú, por 20€ por persona.
Después, ya no nos importó ni el frío ni la lluvia que
empezó a caer y nos dimos otro paseo para que bajase, algo, la comida y a casa.